miércoles, 13 de mayo de 2009

No Dices Más

Interesante. Iba para un retiro kerigmático de la arquidiócesis... 16 jóvenes que inician los procesos de formación para pastoral juvenil estaban viajando en bus mientras yo con mis compañeros de retiro ibamos compartiendo en un auto.



De pronto, uno de ellos, Juan Diego Zúñiga, nos pone una canción y nos pide que le pongamos la atención total...



Se llama NO DICES MAS

GRupo: Ni más ni menos que MOENIA



La letra dice así...


Tras de la lluvia el sol y nunca me senti mejor,
no sé lo que pasó que el mundo de color cambió.
y es que tú apareciste así y sin saber te has metido en mí.

Tanto pensar en tí ya me ha hecho decidir,
me cuesta mucho pero te lo voy a decir
y es que yo ya no puedo más
y ya no me importa lo que vaya a pasar
Solamente tú me puedes destruir o salvar;
dos palabras bastarán.
y te podría esperar hasta que se evapore todo el mar,
pero tú no dices más.

No sé si estuvo bien decirte toda la verdad,
tal vez así lo entiendas y lo sepas valorar.
Solamente tú me puedes destruir o salvar;
dos palabras bastarán.
y te podría esperar hasta que se evapore todo el mar,
pero tú no dices más.
Solamente tú me puedes destruir o salvar;
dos palabras bastarán.







Después Juan Diego se volvió a decirnos... ''escúchenla pero ahora sí... imagínense que es un diálogo con Dios....'' -vuelva a ponerla y leala de la siguiente manera:


YO: -Tras de la lluvia el sol y nunca me senti mejor,no sé lo que pasó que el mundo de color cambió.y es que tú apareciste así y sin saber te has metido en mí.
DIOS: -Tanto pensar en tí ya me ha hecho decidir,me cuesta mucho pero te lo voy a deciry es que yo ya no puedo más y ya no me importa lo que vaya apasar

YO: -Solamente tú me puedes destruir o salvar;
DIOS: -Dos palabras bastarán.

DIOS: - y te podría esperar hasta que se evapore todo el mar,pero tú no dices más.


DIOS: -No sé si estuvo bien decirte toda la verdad,tal vez así lo entiendas y lo sepas valorar.
YO: -Solamente tú me puedes destruir o salvar;
DIOS:- Dos palabras bastarán.

YO:- y te podría esperar hasta que se evapore todo el mar,
DIOS: -pero tú no dices más.
YO:- Solamente tú me puedes destruir o salvar;
DIOS:- Dos palabras bastarán




Fue así como Juan Diego, al estar atento a las cosas del mundo, pero enamorado de Dios, nos recordó la importancia de la creatividad pastoral....





Increiblemente Genial Verdad?